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Quizás este poemario del poeta oriolano Manuel Molina sea el más importante de él, por haberse escrito bajo la censura de posguerra.
Herméutica glosada e ilustrada por el estudios Ramón Fernández Palmeral
Leer artículo en el prestigioso diario MUNDIARIO
https://www.mundiario.com/articulo/cultura/centenario-nacimiento-poeta-manuel-molina/20171019094727103314.html
TEXTO
El día 28 de octubre del presente año se
cumple el centenario del nacimiento del poeta Manuel Molina Rodríguez
nacido en calle Trinidad de Orihuela (Alicante), falleció el 29 de
diciembre de 1990. Cursó estudios primarios y comenzó el Bachillerato en
el Instituto de Orihuela, con el profesor Jesús Alda Tesán quien era
colaborador de la revista “El Gallo Crisis”. En su juventud conoció a
los poetas Carlos Fenoll, Miguel Hernández, a los hermanos Ramón y
Gabriel Sijé. Participó reuniones literarias que éstos celebraban en la
tahona de la calle Arriba. En 1934 estuvo con Miguel Hernández en el
paraje de Matanzas, en la cueva donde éste escribiera su auto
sacramental “Quien te ha visto y quien te ve y sombra de lo que eras”,
que ese verano publicaría José Bergamín en su revista Cruz y Raya de
Madrid. Existen dos cartas manuscritas por Hernández, desde el
Reformatorio de Adultos de Alicante, dirigidas a Josefina Manresa donde
cita a Manuel Molina.
En 1935 se trasladó Molina con su familia a Alicante y un año más tarde presidirá las Juventudes de Izquierda Republicana de esa ciudad. Tras la rebelión militar de 1936 sirvió como carabinero a la defensa de Madrid. En la Alianza de Intelectuales Antifascistas de Madrid Conoció a Rafael Alberti, María Teresa León, Emilio Prados y a Antonio Aparicio. En 1937 visitó a Vicente Aleixandre en su casa de Velintonia de Madrid junto a los milicianos Carlos Fenoll y Jesús Poveda.
Terminada la guerra, y tras pasar por el campo de concentración de la Plaza de Toros de Valencia, regresó a Alicante, tuvo que hacer el servicio militar forzoso con los nacionales en Burgo. Regresó de nuevo a Alicante, y se casó con Maruja Varó Busquiel el 6 de diciembre de 1943, con la que tuvo dos hijas: Marilé y Clemencia. En Alicante, ejerció como capataz de obras, y posteriormente fue secretario de la Biblioteca Gabriel Miró de dicha ciudad, bajo el patrocinio de la Caja de Ahorros del Sureste. Junto a un grupo de poetas de posguerra como el historial Vicente Ramos y el poeta Rafael Azur revitalizaron la vida literaria de la ciudad creando varias revistas literarias y antologías con Tina Mercader, Ángela Gatell, José Albi, Julián Andúgar o María Beneyto. A este grupo de poetas se le unieron pintores como Gastón Castelló, Miguel Abad Mirón, Melchor Aracil, Pérez Pizarro y el escultor Pepe Carbonell.
Actualmente, el legado de Manuel Molina se halla en el Archivo por la Democracia de la Universidad de Alicante, suyos albaceas son Clemencia Molina Varó (hija) y el profesor Cecilio Alonso. La correspondencia epistolar alcanza 3.800 documentos en su mayor parte literario, que corresponde a unos 400 remitentes, entre los que se destacan Vicente Aleixandre, Juan Gil Albert, Josefina Manresa (viuda de Miguel Hernández), Gabriel Celaya, Blas de Otero, Antonio Buero Vallejo, Celia Viñas, Leopoldo de Luis, Ángel Caffarena, Santiago Moreno o Carlos Sahagún.
Molina es autor de una treintena de a libros y poemarios. Uno de ellos, el más destacado en el titulado “Hombres a la deriva” de 1950, donde en plena dictadura publicó dedicó tres sonetos al autor de “El rayo que no cesa”. @mundiario
Quizás este poemario del poeta oriolano Manuel Molina sea el más importante de él, por haberse escrito bajo la censura de posguerra.
Herméutica glosada e ilustrada por el estudios Ramón Fernández Palmeral
Leer artículo en el prestigioso diario MUNDIARIO
https://www.mundiario.com/articulo/cultura/centenario-nacimiento-poeta-manuel-molina/20171019094727103314.html
TEXTO
Centenario del nacimiento del poeta Manuel Molina
Este año se conmemora el centenario del
nacimiento del poeta Manuel Molina, autor alicantino figura clave para
entender la literatura de postguerra. Fue amigo del universal poeta
Miguel Hernández, del que fue paisano, pues ambos nacieron en Orihuela
(Alicante).
21 de Octubre de 2017 (08:34 h.)
En 1935 se trasladó Molina con su familia a Alicante y un año más tarde presidirá las Juventudes de Izquierda Republicana de esa ciudad. Tras la rebelión militar de 1936 sirvió como carabinero a la defensa de Madrid. En la Alianza de Intelectuales Antifascistas de Madrid Conoció a Rafael Alberti, María Teresa León, Emilio Prados y a Antonio Aparicio. En 1937 visitó a Vicente Aleixandre en su casa de Velintonia de Madrid junto a los milicianos Carlos Fenoll y Jesús Poveda.
Terminada la guerra, y tras pasar por el campo de concentración de la Plaza de Toros de Valencia, regresó a Alicante, tuvo que hacer el servicio militar forzoso con los nacionales en Burgo. Regresó de nuevo a Alicante, y se casó con Maruja Varó Busquiel el 6 de diciembre de 1943, con la que tuvo dos hijas: Marilé y Clemencia. En Alicante, ejerció como capataz de obras, y posteriormente fue secretario de la Biblioteca Gabriel Miró de dicha ciudad, bajo el patrocinio de la Caja de Ahorros del Sureste. Junto a un grupo de poetas de posguerra como el historial Vicente Ramos y el poeta Rafael Azur revitalizaron la vida literaria de la ciudad creando varias revistas literarias y antologías con Tina Mercader, Ángela Gatell, José Albi, Julián Andúgar o María Beneyto. A este grupo de poetas se le unieron pintores como Gastón Castelló, Miguel Abad Mirón, Melchor Aracil, Pérez Pizarro y el escultor Pepe Carbonell.
Actualmente, el legado de Manuel Molina se halla en el Archivo por la Democracia de la Universidad de Alicante, suyos albaceas son Clemencia Molina Varó (hija) y el profesor Cecilio Alonso. La correspondencia epistolar alcanza 3.800 documentos en su mayor parte literario, que corresponde a unos 400 remitentes, entre los que se destacan Vicente Aleixandre, Juan Gil Albert, Josefina Manresa (viuda de Miguel Hernández), Gabriel Celaya, Blas de Otero, Antonio Buero Vallejo, Celia Viñas, Leopoldo de Luis, Ángel Caffarena, Santiago Moreno o Carlos Sahagún.
Molina es autor de una treintena de a libros y poemarios. Uno de ellos, el más destacado en el titulado “Hombres a la deriva” de 1950, donde en plena dictadura publicó dedicó tres sonetos al autor de “El rayo que no cesa”. @mundiario
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